UNA EXPEDICIÓN, 14 EXPLORADORES Y 6 JEEPS
En noviembre de 1978, Mark A. Smith, un famoso jeepero, que en ese entonces tenía 25 años de experiencia off-road, lideró la Expedición de las Américas, que cruzó todo continente americano. El viaje comenzó en Tierra de Fuego, Chile, la región más al sur y terminó en la Bahía de Prudhoe, en Alaska, el punto más al norte de América.
Para lograrlo, los 14 jeeperos que participaron en la expedición, usaron seis Jeep CJ-7 de color naranja. Las camionetas 4×4 tenían equipadas llantas de 31 pulgadas, cabestrantes y soportes para sujetar su equipo, así como las escaleras diseñadas para cruzar los terrenos más problemáticos.
Durante la expedición se cruzaron 21 mil millas (33,796.22 km), en 122 días, a través de toda clase de climas y paisajes: desde el caluroso desierto de Atacama, hasta selvas húmedas de Sudamérica y el inclemente frío de Yukón y Alaska.
Para lograrlo, los exploradores siguieron un estricto itinerario de viaje y condujeron por largas horas. Cada día recorrían entre 650 y 950 km diarios, por lo que no era raro que tuvieran que dormir a un costado del camino o acampar en regiones inhóspitas.
Aún con todo esto, les quedaba tiempo para divertirse, como se aprecia en el documental del viaje. En Chile tuvieron una fiesta con un grupo de guasos (el equivalente al charro en México) y en Perú se dieron tiempo para conocer el lago Titikaka y la ciudad de Machu Picchu.
Tras 21 días, el grupo el equipo se enfrentó a su mayor desafío para ir de Colombia a Panamá: el Tapón de Darién, una selva espesa, sin ninguna clase de camino, y que hasta ese entonces pocos había cruzado.
EL MÁS GRANDE DESAFÍO PARA LOS JEEPS
- Cruzar los 321 km de jungla les tomó 31 días. Fue un mes entero de continuas subidas y bajadas, de tener que abrirse paso, con machetes, a través de la densa jungla, de salir de lodazales y de ingeniárselas para superar zanjas y reparar los Jeeps en el camino.
- También tuvieron que soportar la humedad, el calor y los constantes piquetes de mosquitos. Pero luego de tal desafío el resto de la travesía pareció sencillo. Tras salir de selva, se detuvieron en la ciudad de Panamá a comprar souvenirs y (seguramente) para darse un merecido descanso.
En Guatemala y en la Península de Yucatán, se detuvieron a conocer más de la cultura maya en las zonas arqueológicas y tras 84 días de viaje continuo, cruzaron la frontera entre México y Estados Unidos, su país de origen.
Con todo el dolor del mundo dejaron su país hasta llegar a Canadá, donde pudieron apreciar las magníficas vistas de la región de Yukón. Ahí en el norte llegó su último gran desafío: temperaturas de -45°C y poderosas tormentas de nieve, que limitaron su visión a escasos siete metros del vehículo. Tras superar esta prueba, finalmente llegaron a los blancos paisaje de Alaska.
La Expedición de las Américas es una muestra del espíritu de aventura, libertad y curiosidad de los jeeperos alrededor del mundo, y será por siempre recordado en la historia de Jeep y las camionetas 4×4.
Como estos valientes exploradores, deja salir tu propio espíritu de aventura. Mira nuestros artículos sobre cómo preparar tu primera ruta 4×4 y sobre dónde encontrar rutas todo terreno.